Es un seriado de tan sólo 10 capítulos donde trataremos en forma muy amigable diferentes temas que afectan nuestras relaciones interpersonales y nos joden la vida. El objetivo es participar todos, entre todos sobrevivir y recomendarnos libros, música o películas.
¿Qué hacen
muchos padres cuando su niño (a) es el más rudo de todos y se lleva por delante
a otros incluyendo niñas? ¿Acaso no se felicita al más fuerte? ¿No se hinchan de orgullo cuando su hijo (a)
domina a todos los demás?
Si,
piensan que es un futuro líder, pero en realidad están creando a un abusivo, un
futuro golpeador de personas, a alguien a quien será muy difícil contrariarle o
rebatirle ideas, ¿El niño (a) tiene la responsabilidad? No. Los padres
permisivos son los artífices de las futuras situaciones irregulares por no
atajarlas a tiempo, en el momento.
Hollywood
nos ha mostrado hasta el agotamiento que los niños grandes, gordos o muy
fuertes abusan de los más débiles físicamente, los obligan a hacerle las tareas
y a callar, hay decenas de películas que son una radiografía de ese sector de
la sociedad norteamericana, pero la nuestra no se queda atrás, para nada.
¿A dónde
se fueron los niños abusivos al crecer? ¿Se mudaron de planeta? No. Ahora son
más peligrosos, porque de pequeños golpeaban a otros por unas canicas o sólo
por “divertirse”, pero ya pasados los once años son depredadores y con el
despertar de las hormonas, se convierten en las figuras más temibles de su
generación: En depredadores sexuales o sicológicos, en realidad, ambos.
Un
noviazgo que incluya maltrato físico o psicológico no va a terminar en nada
bueno, así lleguen al altar, sólo imagine por un momento que “su hija” está
siendo amenazada por su novio, obligada a callar y a no decirle nada a usted
por temor a perder la relación o peor aún: recibir una paliza o un castigo. Si, hablo de su hija. Imagine a su hijo
siendo golpeado constantemente sólo por ser flaco o pequeño, que no pueda
decirle nada usted por pánico a que le pase algo peor y sí, estoy hablando de “su
hijo”.
Los jóvenes
abusivos no desaparecen. Crecen y se integran a la parte productiva de la
sociedad en diferentes formas, pero a donde vayan parecerán líderes, sólo que
realmente siguen siendo los mismos depredadores, ahora tienen más recursos,
fuerza, dinero, cargos, posiciones, influencia y alcance, eso los hace indetenibles
en el logro de sus propósitos ¿Y los padres permisivos? Creyendo que construyeron a un líder de
masas, un orgullo familiar y un ejemplo a seguir por todos.
Estos
jóvenes abusivos se casan y tienen hijos, también tienen socios y empleados, se
relacionan con vecinos y conocidos, viven con el camuflaje que le brinda la
sociedad y los aceptamos con gusto, pero más de una persona que ha pensado
diferente a ellos o les ha contrariado en alguna manera, ha recibido su
merecido ¿Por qué? Porque cuando niños nadie les atajó el día que le dieron una
cachetada durísima en la cara del abuelo sino que le celebraron la gracia,
porque de pequeños insultaron a la señora que los cuidaba y para los padres
sólo eran “cosas de niños”, porque de jóvenes acosaron al gordito de la cuadra
y se concluyó que estaban “acoplándose”, porque cuando le dieron una paliza a
otro chico en grupo nadie intervino porque eran situaciones “pasajeras” y el
chico diferente se lo buscó. Y cuando le dieron la primera bofetada a sus
esposas nadie se metió porque son “cosas de marido o mujer” y porque ella quizá
se lo merecía por no “considerar” a su marido y todo lo que hace por ella, por
sus hijos, etc.
En el año 2002
se estrenó la película “Nunca más”
dirigida por Michael Apted y protagonizada por Jennifer López y Billy Campbell,
ella es una camarera que conoce a un millonario, congenian, se casan y tienen
una linda hija, descubre que él es infiel por lo que le reclama y como
respuesta recibe varias palizas, ella decide huir con su hija por varios
estados donde él siempre la encontraba con ayuda de un amigo policía,
finalmente ella se cansa de huir y se arma de valor, se entrena en defensa
personal y decide enfrentarlo, llevando la mejor parte pero dejándole huella
emocionales de por vida.
Es una
historia de ficción, pero ¿Cuántas personas que están ahora leyendo estas
líneas han sido abusadas, maltratadas o golpeadas por su pareja? ¿Cuántos de
nosotros llevamos huellas imborrables de un pasado abusivo? O peor aún ¿Cuántos
lectores están viviendo el infierno del maltrato físico justo en este
momento?
Un amigo
padre soltero de dos hijas ya mayores de edad, me comentaba lo siguiente: “La primera paliza es culpa del hombre,
pero las siguientes son culpa de la mujer”.
Y tiene sentido, el primer maltrato físico viene precedido de una
mala relación cargada de desencuentros que pueden finalizar en un empujón, un
rodillazo, un manotón, una cachetada, un apretón muy exagerado de la mano o del
cuello. No hace falta que sean las palizas que le daban a Jennifer López en la
película, una persona puede demostrar su violencia con pequeños actos que no
deben pasarse por alto nunca, son una clara señal de alerta, y de nuevo: No
deben dejarse así.
Cuántas
veces hemos escuchado a las maltrechas esposas decir: “Es que yo me lo busqué,
él estaba cenando y lo molesté con mis comentarios” ó “Es que está muy
estresado y no lo ayudo lo suficiente” o “Está pasando por un mal momento, pero
él no es así” ó “No es nada, no volverá a pasar”. Todas las mujeres que han pasado por algunas
de estas y otras frases han vuelto a sufrir agresiones y algunas han muerto. Así
de crudo voy a ser esta vez.
La primera
agresión se detiene en el momento. Se discute cuando bajen los ánimos. Se trata
primero en privado y luego en público con los padres, suegros o con ayuda
especializada. Se deja bien claro que no puede volver a suceder nunca más y se
debe resolver de inmediato. Nunca, lea bien, nunca deben pasar por alto las
agresiones físicas. Desde un pisotón malintencionado por un desacuerdo hasta un
puñetazo en la cara o el cuerpo, deben ser tratados acorde a la situación. Para
eso hay leyes en nuestros países y en estos tiempos de tanta “justicia social”
se han creado ONG´s, Institutos, Departamentos y Ministerios de todo tipo para
canalizar adecuadamente ante las leyes locales estas situaciones irregulares.
No lo deje pasar nunca, deténgalo.
Muchos
hombres abusan cuando su pareja no tiene quien las defienda, como un padre
activo o unos hermanos, primos, etc. El
terreno perfecto de un abusivo es el que le ofrece una mujer que se aparta de
su familia y amigos. Cuando un abusivo
no ve a otros hombres relacionarse con su víctima, avanza sin problemas porque
¿Quién lo va a detener?
Este tema
es amplio y muy rico en detalles. Por lo pronto si usted está siendo víctima de
un abusivo, llegó la hora de detenerlo. Nunca más, como el nombre la película.
¿Sabía usted que no sólo los hombres abusan de sus parejas femeninas? ¿Tiene
idea del avance de los abusos femeninos en contra de hombres? ¿No lo cree? Se sorprendería.
Sigamos conversando.
Lo acabo de leer y de verdad es un tema para reflexionar, eso pasa día a día en nuestra sociedad, sobretodo las mujeres tratan de ocultar el maltrato, es algo muy triste, al final terminan afectadas Psicológicamente, del respeto pasan al miedo, gracias por tocar este tema tan complejo,
ResponderEliminarGracias a ti mi amigo, para servirte siempre ok? Un abrazo!
ResponderEliminarExcelente, sin desperdicio. Cómo siempre...!
ResponderEliminar